Te damos la respuesta a que hacer si mi hijo solo come lo que le gusta. Pues, para ello tenemos algunos trucos y consejos que pueden servirte de mucha ayuda.
Elabora platos espontáneos y divertidos, a ellos les encanta colaborar y probar cosas nuevas echos por ellos mismos, es una técnica excepcional. Ya veras!
Que hacer si mi hijo solo come lo que le gusta
En primer lugar, averigua si esto es lo que realmente ocurre o si es sólo lo que ves. Muchas veces, pensamos… mi hijo solo come pasta , pero en casa de los abuelos ó en el colegio el niño come de todo.
Incluso en tu propia casa sin haberte dado cuenta, es posible que el niño esté picoteando pan, yogures, zumos… Si juntas todo esto, verás que está más cerca de lo que crees de una alimentación equilibrada.
Ayúdale a que se involucre en la creación del ritmo de comidas. Hazlo participar en la preparación de los platos sencillos, déjalo que ponga la mesa, llévalo al mercado contigo…
Si se involucra, será él quien pida a los demás que respeten unas ciertas pautas de comida, porque entenderá que la comida hay que ingerirla después de prepararla (no seis horas más tarde).
Aun así, ten en cuenta que está en la etapa del “sólo me gusta esto” y mi hijo come lo que le gusta. Por muchos esfuerzos que hayas hecho, el gourmet de tres-cuatro años entra en un período de uniformidad en sus gustos. Y además, esos caprichos cambian continuamente.
Tiéntalo a probar otras cosas para que se vaya acostumbrando a los sabores de su cultura gastronómica, pero no lo fuerces, busca alternativas para la posible falta de proteínas o vitaminas: frutos secos, zumos, ensaladas especiales para él…
Piensa en el momento ideal para empezar a establecer límites. Un buen ejercicio para ayudar al niño en endoculturizarse es empezar con los (chuches). En esta edad se puede, perfectamente, establecer una norma clara de respeto a ellas.
Cuéntale con su lenguaje, cuál es la razón por la que no se puede atiborrar de ellas o por qué no se pueden ser un sustituto de otras comidas. Para eso, busca una frase clara, concisa y que a él le concierna, por ejemplo “ si comes muchas chucherías te dolerá la barriga”.
Evita en todo momento la frase, mi hijo solo come lo que le gusta y empieza a enseñarle a comer alimentos frescos y de temporada divertidos, para que se sienta con ánimo de probarlos. Verás como funciona.